Si hacemos actividades que tienen que ver con salto, con correr, o con los rebotes es mejor hacerlos sobre el césped, ya que amortiguan el impacto a nivel articular.
Algunas de las actividades que podemos realizar al aire libre
Las actividades son para todas las edades. Una persona grande puede hacer una clase de entrenamiento funcional, si esa clase tiene sus regresiones y progresiones adecuadas, todo depende del profesor y de que la propuesta sea acorde al nivel de cada uno.
– Running: es un ejercicio cardiovascular por excelencia con múltiples beneficios para el corazón, los músculos y los huesos.
– Entrenamiento Funcional: son diferentes ejercicios que se adaptan a los movimientos naturales del cuerpo sobre patrones de movimientos distintos.
– Entrenamiento de Cuerpo y Mente: stretching, yoga, elongación, RPG (ejercicios para mejorar la postura), body combat, aero combat, ritmos (zumba, fit dance y latinos).
Romero: “Si bien hay distintas actividades que se ponen de moda, lo más recomendable es que cada persona busque la actividad física más adecuada a sus características y estilo de vida. Para eso es necesario que consulte con un profesional, quien lo va a saber guiar sobre qué tipo de actividad física le conviene más y no hacerlo por moda”
Cualquier persona que quiera comenzar a realizar actividad física debe tener en cuenta:
Hacerse un examen médico exhaustivo que contemple, no solo el estudio de sangre y electrocardiograma, sino también la consulta con un traumatólogo o kinesiólogo para tener un panorama más preciso de las actividades que podemos realizar y cuáles no.
El profesor Romero afirma que: “Con estos estudios podemos programar un entrenamiento lo más funcional posible y adecuado a nuestro cuerpo”.
Los beneficios de realizar actividad física quedan evidenciados a los dos o tres meses de haber comenzado. Los resultados cambian y para bien. El impacto positivo del trabajo cardiovascular en los triglicéridos (colesterol bueno) y las lipoproteínas de alta intensidad es notable y está comprobado. Además, la actividad física fortalece los músculos colaborando a mantener la densidad de los huesos, evitando futuros problemas en ellos.
El profesor especifica que: ”Es importante evaluar, además del estado clínico, la fuerza y la postura para estar seguros de que el ejercicio que está realizando la persona es el correcto y acorde a sus características físicas”.
Algunas actividades se pueden realizar en el parque. Romero sugiere que: “Si se quiere empezar a correr, lo ideal es realizar una consulta con el ortopedista, quien puede evaluar qué tipo de pisada se tiene y eventualmente recomendar el uso o no de plantillas ortopédicas para evitar lesiones”. “No hay que tener demasiados conocimientos previos y no existen mayores riesgos para empezar a entrenar en el parque o en espacios abiertos. Sí es importante asegurarse que esos espacios estén aptos para realizar el ejercicio. Por ejemplo: que la superficie del piso sea lo más pareja posible y que no haya ningún objeto o material que nos pueda producir un corte o una lesión durante el entrenamiento”.
Siempre es preferible entrenar cuando el día está despejado y no cuando llueve o hay tormentas porque podemos correr el riesgo de sufrir algún tipo de accidente, por ejemplo, con una rama caída producto del mal clima.
En Megatlon además de las múltiples clases que se dictan en los gimnasios, los socios tienen la posibilidad de realizar actividades grupales al aire libre, pudiendo optar por Running, Cycling o Rollers, según la preferencia de cada uno:
“Algunas de ellas se realizan todos los sábados y otras son itinerantes. También solemos instalar una carpa, cada vez que hay carreras emblemáticas como la de los 42K de la Ciudad de Buenos Aires, donde le brindamos a los miembros acceso exclusivo a puestos de hidratación, snacks saludables para recuperar energía, profesores que guían el precalentamiento antes de la carrera, guardarropas y un lugar seguro para dejar la bici”, cuenta Romero.
