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La clave de la entrada en calor


Publicada: 2022-09-02 14:25:05

Germán Laurora, Licenciado en Educación Física y Coordinador de los programas de entrenamiento de Megatlon nos cuenta el por qué es mejor empezar a entrenar en caliente.
Una buena entrada en calor generalmente se compone de tres partes: ejercicio aeróbico, estiramientos dinámicos y ejercicios específicos.

Laurora: “el ejercicio aeróbico consiste en caminar, correr, pedalear o remar a una intensidad intermedia y sostenida” explicó.

A su vez desataca que “la duración debe tener la primera parte de la entrada en calor entre cinco y diez minutos, dependiendo especialmente de la temperatura del ambiente en el que estemos entrenando” es muy importante respetarla.

También agregó que el objetivo perseguido en estos primeros minutos es aumentar la temperatura de los músculos y del cuerpo en general. Esto facilitará todos los procesos de transformación de la energía que incorporamos con los alimentos en energía utilizable para la contracción muscular y reducirá la resistencia de los músculos al estiramiento, permitiendo mayores amplitudes articulares en el trabajo posterior.

Dijo: “los estiramientos dinámicos en movimientos controlados en los que buscamos los límites de movimiento de las articulaciones, sin llegar a sentir dolor y sin sostener las posiciones finales” son una de las claves para no padecer molestias.

Clarífico, que la duración debe tener esta segunda parte fundamental que es entre tres y cinco minutos.

Los estiramientos dinámicos y no estiramientos estáticos en la entrada en calor.

A diferencia de los estiramientos estáticos (máximas amplitudes de movimiento sostenidas por varios segundos), los estiramientos dinámicos potencian el trabajo del núcleo de la sesión. Los estiramientos estáticos, realizados en la entrada en calor, impactan negativamente en el rendimiento subsecuente, para tener en cuenta estas diferencias, afirmó.

La última parte de la entrada en calor.

Se harán ejercicios específicos altamente relacionados con la actividad a realizar en el núcleo de la sesión. Si vamos a correr, podríamos realizar ejercicios de técnica de carrera. Si nos toca un trabajo de fuerza, podríamos realizar ejercicios similares a los que se ejecutarán en la parte central del entrenamiento, pero que sean de una intensidad inferior (Ej. flexo-extensiones de brazos antes de un trabajo de fuerza máxima en empuje de pecho).

Afirma que: “debido que toda actividad física compromete, en menor o mayor grado, a la musculatura estabilizadora de la columna vertebral, los ejercicios de “core” (puentes, abdominales, espinales) pueden ser incluidos en esta última parte”